Visita la Manzana Histórica de Viedma

La Manzana Histórica de Viedma es un lugar de gran relevancia cultural y arquitectónica, que alberga algunos de los edificios más antiguos de la ciudad. Esta área, situada en el corazón de Viedma, es un testimonio palpable de la rica historia de la Patagonia y se ha convertido en un atractivo turístico para quienes buscan explorar las raíces de esta región.

Al recorrer la manzana, es imposible no maravillarse ante la majestuosidad de sus estructuras. Entre los edificios más emblemáticos se encuentra la Catedral Nuestra Señora de la Merced, cuyo campanario sigue funcionando y marca la hora como lo ha hecho a lo largo de los años. Este edificio, inaugurado en 1902, es un ejemplo destacado de la arquitectura pertinente a la época, con detalles que reflejan la dedicación de sus creadores.

Adyacente a la Catedral, encontramos el Colegio San Francisco de Salud, un espacio que ha jugado un papel fundamental en la educación de varias generaciones. Este colegio, construido en la misma época, también ha logrado conservar sus características arquitectónicas a lo largo del tiempo, brindando a los visitantes la oportunidad de apreciar su diseño original.

La manzana también alberga el Museo Salesiano, donde se puede profundizar en la historia de los salesianos y su influencia en la educación y cultura de la Patagonia. Este museo ofrece exposiciones que narran la vida y la obra de aquellos que dedicaron su vida a la enseñanza y al desarrollo de la comunidad.

La Plaza Alsina, que se encuentra frente a la manzana histórica, es otro punto de interés. Considerada la plaza más antigua de Viedma, ha sido declarada Patrimonio Histórico Nacional. Esta plaza, que ha sufrido varias transformaciones a lo largo de los años, es un espacio ideal para descansar y absorber la atmósfera del lugar. Aquí, la estatua del General San Martín se erige como un recordatorio de la historia y el legado que ha forjado esta ciudad. Es interesante notar la simbología en la posición del caballo en la escultura, detalle que revela aspectos sobre la vida del general.

Viedma, en su conjunto, presenta una combinación de modernidad y herencia histórica. Aunque la ciudad se caracteriza por sus amplias calles y edificios contemporáneos, es en la Manzana Histórica donde realmente se puede apreciar el pasado que ha moldeado su identidad actual. Este contraste ofrece una experiencia rica para los visitantes, quienes pueden contemplar cómo la ciudad ha evolucionado mientras al mismo tiempo conserva su historia.

Además de su valor arquitectónico, Viedma es famosa por su participación en el sector vitivinícola, destacándose la Bodega Familiar Humberto Canale. Durante el año, se celebra la Fiesta Nacional de la Manzana, un evento que reúne a locales y turistas para celebrar la cultura, la música y la gastronomía de la región, donde las manzanas forman parte del legado vitivinícola.

Para aquellos interesados en la naturaleza, la costanera de Viedma ofrece un espacio para recorrer y contemplar la belleza del paisaje ribereño. Desde aquí, también es posible realizar paseos en catamarán hacia las islas cercanas, una experiencia que no debe perderse, especialmente en los meses de verano.

En resumen, si planeas visitar Viedma, no puedes dejar de explorar la Manzana Histórica, un lugar que no solo preserva la historia arquitectónica de la ciudad, sino que también ofrece una conexión profunda con su patrimonio cultural. Este recorrido es una invitación a adentrarse en el legado de una ciudad que ha logrado mantenerse viva y relevante a lo largo del tiempo, proporcionando una fascinante experiencia para los amantes de la historia y la arquitectura.