Descubre el Té Galés en Trevelin: Sabor y Tradición

Trevelin, un pintoresco pueblo ubicado en la provincia de Chubut, Argentina, es conocido por su rica herencia cultural galesa. Este encantador destino a solo 26 kilómetros de Esquel no solo ofrece espectaculares paisajes andinos, sino que también es famoso por su exquisito té galés. Esta tradición, profundamente arraigada en la comunidad local, ofrece a los visitantes una experiencia gastronómica única que refleja la historia y cultura de la zona.

Al llegar a Trevelin, es esencial visitar la Casa de Información Turística, situada en la Plaza Coronel Fontana, el corazón del pueblo. En esta plaza, que sorprende por su peculiar forma octogonal, los visitantes pueden sumergirse en la cultura local y disfrutar de la belleza del entorno. Cada fin de semana, se celebra una feria artesanal donde artesanos y turistas se congregan para compartir sus productos y disfrutar de espectáculos.

El té galés es más que una simple bebida; es una ceremonia que se celebra con esmero y que representa la fusión de sabores tradicionales galeses y patagónicos. Este evento social generalmente se lleva a cabo por las tardes en las casas de té, donde los comensales son recibidos con una generosa bandeja de salados, que pueden incluir panes con manteca y una variedad de quesos. Posteriormente, se les ofrece un festín de delicias dulces que incluyen tortas y, especialmente, la típica torta galesa elaborada con azúcar negra y frutas secas.

Para aquellos que desean profundizar en el arte de esta tradición, las casas de té abren sus puertas a partir de las 15:30 horas, brindando un ambiente acogedor donde los visitantes son atendidos con amabilidad. La Casa de Té Nine Maggie es una de las más renombradas en Trevelin, famosa por su cálida atmósfera y sus deliciosas opciones de repostería.

No obstante, Trevelin no es solo un lugar para disfrutar del té. La comunidad también ha sabido conservar la historia galesa a través de otros elementos culturales, como la Capilla Bethel y la escuela que enseña el idioma galés. Estas instituciones son testimonio del arraigo de la cultura galesa en la región, lo que se siente en cada rincón del pueblo.

Durante el mes de octubre, Trevelin se viste de gala con la espectacular floración de tulipanes. Esta colorida exhibición atrae a numerosos visitantes que desean apreciar la belleza natural del lugar y disfrutar del contraste entre los vibrantes colores de las flores y el majestuoso fondo andino. El evento se convierte en una oportunidad perfecta para combinar la experiencia del té con un paseo por los campos de tulipanes.

Además, si el tiempo lo permite, es recomendable explorar las Cascadas Nant y Fall, un majestuoso espectáculo natural que representa otro de los atractivos del área. El acceso a estas maravillas se realiza a través de la Ruta Nacional 259, que conecta Trevelin con la frontera chilena, y ofrece panorámicas que enamoran a cada visitante.

Pero Trevelin no se limita a sus bellezas naturales. La Trochita, el tren de vapor que conecta Esquel con Ingeniero Jacobacci, evoca un transporte histórico que ha sido restaurado para ofrecer una experiencia única a quienes desean revivir el pasado. Este atractivo turístico permite a los pasajeros disfrutar de un viaje de tres horas a través de deslumbrantes paisajes, envueltos en el característico sonido de la locomotora a vapor.

Para los viajeros que deseen disfrutar de esta magnífica región, el viaje desde Esquel a Trevelin es sencillo y accesible, ya sea en automóvil de alquiler, remís o bus de línea regular. La ruta se caracteriza por sus hermosos panoramas, lo que convierte la travesía en una parte esencial de la experiencia.

Con cada visita a Trevelin, los viajeros no solo viven la experiencia del té galés, sino que también se sumergen en la historia de un pueblo que celebra sus raíces con orgullo. Acceder a sus costumbres, disfrutar de sus paisajes y deleitarse con su gastronomía hace de este destino un lugar imperdible en la Patagonia argentina. Cada taza de té se convierte en un homenaje a la herencia cultural galesa y una invitación a explorar un mundo de sabores que perdura a través del tiempo. En este rincón de la Patagonia, el té galés funciona como un puente que conecta a los visitantes con la historia, tradiciones y el calor de una comunidad que abraza su identidad con cada sorbo.

En resumen, Trevelin es un destino que no solo destaca por su belleza escénica sino también por el legado gastronómico que ofrece a través del té galés. Al recorrer sus calles, participar en su tradición del té y explorar sus alrededores, uno se lleva consigo un pedazo de la historia galesa que todavía vive en la Patagonia, haciendo de este viaje una experiencia verdaderamente inolvidable.